domingo, 19 de diciembre de 2010

Palacio Peñaflor, Écija

El Palacio de Peñaflor, o más conocido en su localidad como Palacio de los “balcones largos”, es un edificio barroco del siglo XVIII, situado en Écija, en la provincia de Sevilla.

El palacio fue construido entre los años 1700 y 1775. Está declarado como “Monumento Histórico-Artístico” desde 1962 y protegido como Bien de Interés Cultural. El palacio fue residencia de la familia de Peñaflor hasta 1958, cuando falleció la marquesa viuda y sin descendencia. Ella legó el palacio y todos su bienes para su restauración y puesta en valor, pero esto no se cumplió y se vendió el palacio en 1992 al Ayuntamiento de Écija.

El edificio está situado en la antigua calle de los Caballeros y destaca por sus formas curvas y por la profundidad que crea la fachada. En el segundo cuerpo se abre un balcón que servía para que los Marqueses hicieran sus apariciones públicas. En el figuran pinturas al fresco policromadas, alternando paisajes con arquitectura fingida. Sumado a lo anterior está su excepcional portada barroca y haciendo esquina su mirador. El interior del palacio se organiza en torno a un patio central rodeado por todas las habitaciones de vivienda distribuidas en una planta baja y otra superior.

A pesar de estar catalogado como Monumento Nacional, se inició un proyecto de convertir el edificio en un hotel de lujo, una iniciativa que puso en marcha el último gobierno del PA y PP (1999-2003), y que ha sido frustrado durante el actual gobierno en minoría del PSOE. Ahora, se encuentra abandonado, repleto de materiales de la obra comenzada y sujeto a un preocupante deterioro. No solo eso, además la asociación Amigos de Écija denuncia que "fue lamentable que la empresa encargada de las obras del Salón (otro elemento de Écija de gran interés patrimonial) lo utilizara como almacén donde el trasiego de materiales y maquinaria era una constante" y también "los papeles del s. XVIII pintados a mano están rasgados; cascotes y escombros se amontonan en zonas nobles".

No terminando aquí el escándalo, el Partido Popular ha denunciado tener conocimiento de que se está ofertando piezas catalogadas como contenido del palacio en el mercado negro, tal y como destacaba el portavoz popular, Ricardo Gil Torresano, en el pleno ordinario de julio, donde declaró contar con “información fehaciente de que puede haber una expoliación de elementos” Este es el caso de un macetero barroco, registrado con el número 685 en el catálogo de bienes muebles del monumento.


Actualmente se encuentra en la Lista Roja de Patrimonio por deterioro y abandono del edificio por parte de el Ayuntamiento de Écija, quién además de haber sido multado por no usar la subvención recibida para restaurar el edificio, se saca de la manga excusas para no tener que devolver dicha subvención.


Para terminar os dejo el video confeccionado por la asociación Amigos de Écija donde se ha recopilado extenso material fotográfico que muestra su estado.

http://www.youtube.com/watch?v=H8oFfFtdpa4


1 comentario:

Antonio José Damigo dijo...

Por desgracia, este tipo de acciones por parte de nuestros políticos, que abandonan el legado que nos llega hasta nuestros días por el simple hecho de no ser rentable económicamente y que para colmo con el dinero que les dan por subvención no lo emplean para restaurarlo, sino para otros fines que seguramente sea mejor no saber.

Y no sólo se abandona en este caso, sino además se usa como almacen con el gran deterioro que trae a unas estructuras antiguas y que es consentido por sus dueños, el ayuntamiento de Écija, los cuales no tienen ninguna educación para conservar lo que nos llega. Tantos años de preservación por sus legítimos dueños, perdidos en unos años.

Sin lugar a dudas, la mayor herramienta que tenemos es la de educar para que esto no siga pasando, además de educar a los niños que algún día estarán ahí, también necesitamos educar a los que ya están, para que no se pierda más el legado que nos dejan nuestros antecesores.